Las pestañas son "las olvidadas" por muchas de nosotras en el cuidado facial diario. Dedicamos horas a nutrir la cara, cuello y escote, y nos olvidamos de ellas, como si se mantuvieran espesas y largas (por lo menos en mi caso) como cuando éramos jóvenes. Además del castigo que le damos diariamente aplicándonos el rimel, y dejándolo todo el día.
Pues os digo que no os preocupéis. He encontrado un remedio natural, para que tengamos pestañas largas y espesas para rato. Se tratra de una mezcla simple, natural y económica. Pero os aconsejo que lo apliqueis con mucho cuidado y poca cantidad. Es una mezcla de 4 a 1 de aceite de oliva y zumo de limón. Es decir 4 partes de aceite por una de limón. Lo preparais vosotras mismas en casa, se pone en un frasco y se aplica en las pestañas y el nacimiento de las mismas dos veces al día. Se deja en las pestañas unos 20 minutos, con cuidado que no entre dentro del ojo y luego hay que retirarlo con abundante agua fría y se seca sin frotar.
El preparado del frasco se puede guardar hasta 3 días en la nevera. Y no olvidéis que si os pasáis en la cantidad del preparado, lo podéis utilizar para la ensalada.